Se considera que la conductividad eléctrica aumenta con el incremento de la salinidad y que el nivel de salinidad va a ser mayor en las bebidas isotónicas que en el agua, dado que las primeras suelen asociarse a la recuperación después del deporte.
La conductividad eléctrica aumenta al aumentar la salinidad en el líquido. Las bebidas isotónicas tienen mayores niveles de sal que las aguas. Por tanto, las primeras nos darán ventaja sobre el agua, a la hora de recuperarnos después de una actividad física, ya que, además de hidratarnos, favorecen la reposición de las sales perdidas.