Si un sistema de imanes en movimiento interactúa con una bobina, se inducirá una corriente eléctrica proporcional a la velocidad del movimiento y a la intensidad del campo magnético. Además, si los componentes del generador se mantienen a una temperatura más baja, la reducción de la resistencia del material conductor y la mejor conservación de las propiedades magnéticas del núcleo podrían incrementar la eficiencia del sistema. Se considera que, dentro de un rango de temperaturas moderado, el enfriamiento del generador puede proporcionar una mejora mensurable en su producción de energía eléctrica.
La inducción electromagnética permite convertir energía cinética en energía eléctrica de forma eficiente. Los resultados obtenidos pueden aplicarse en dispositivos sostenibles de recuperación energética. Además, la experimentación sugiere que la temperatura podría llegar a ser un factor que mejore la eficiencia obteniendo más electricidad con menor energía cinética, aunque se requiere más investigación para determinar hasta qué punto el enfriamiento puede mejorar la generación de energía de manera práctica.